¡Levántate de nuevo!

Una de las cosas que el enemigo siempre intenta es hacernos tropezar en el camino, y a ser posible, que ya no nos levantemos, que permanezcamos caídos.

Es por eso que, es muy importante que siempre tengas esto claro: en cualquier circunstancia por la que estés pasando, siempre tienes que levantarte de nuevo. Ya sea que te sientas desanimado por los problemas de la vida, o por injusticias que has sufrido, o por errores que has cometido, ¡nunca debes permanecer caído!

El rey David se encontró con una de las peores situaciones que hubiese podido nunca imaginar: los ejércitos enemigos habían saqueado y quemado el campamento del pueblo de David y sus hombres. No solo se llevaron todos los objetos de valor, sino que, además, se llevaron también a sus mujeres e hijos como botín.

David estaba en el momento más bajo de su vida, en una angustia total, y sus hombres incluso hablaban de apedrearlo por haber permitido que eso ocurriese. ¡No es fácil imaginar una situación peor que esta! Pero, en esos momentos, David hizo algo que cambió su destino y el de todo el pueblo: dice que David “se fortaleció en el Señor su Dios” (1º Samuel 30:6, LBLA).

David, en ese momento, se levantó, consultó al Señor, y movilizó a todo el pueblo para ir en busca de sus familiares. Con la ayuda del Señor, fueron capaces de alcanzar al ejército enemigo, vencerlos, y recuperar a sus mujeres e hijos sanos y salvos. Lo que parecía que era una situación sin solución se convirtió, al final, en un testimonio más de la fidelidad de Dios.

Mi querido/a amigo/a, pase lo que pase, ¡no te rindas! Levántate hoy en oración, “fortalécete en el Señor y en el poder de Su fuerza” (adaptado de Efesios 6:10), y ¡lucha! No tires la toalla. Levántate en fe y declara la victoria de Dios sobre tu vida y sobre la vida de tus familiares, así como en todas las situaciones adversas que haya contra ti. Dale gracias a Dios por adelantado, llénate de Su gozo y de Su Presencia, dale toda la gloria, confiesa Sus promesas… y deja que Él pelee por ti.

¡Eres un Milagro!
-Christian Misch

AHORA YA SABES CUÁNTO PODER TIENE LA ORACIÓN EN TU VIDA. No te quedes sin dar pasos para crecer cada día más en tu relación con la fuente de ese poder, Dios. Recuerda: estos textos son extraídos de Un Milagro Cada Día. Si quieres recibir cada día un mensaje de aliento en tu correo electrónico, puedes suscribirte en este enlace. Además, al suscribirte, recibirás el libro electrónico “10 claves para conectarte con Dios”, el cual te ayudará a profundizar en tu comunión con Dios.