Humilde De CorazónMuestra

"Humilde De Corazón"

Jesús nos dijo: "Pónganse mi yugo. Déjenme enseñarles, porque yo soy humilde y tierno de corazón, y encontrarán descanso para el alma." Mateo 11:29 (NTV).

Cuando nuestra alma está en paz con Dios, con nosotros mismos y con los demás; podemos sentir el verdadero descanso que necesita nuestra alma. Esa paz la hemos recibido por la obediencia de Jesús; obediencia hasta la muerte, hasta haber perdido su vida por nosotros, sin que nosotros lo mereciéramos. Él nos enseñó con su ejemplo que había Uno, el Padre, a quien se debía y se sometía por completo; Uno, de quien dependía en absoluto.

Jesús, humilde y tierno de corazón; no estimó ser igual a Dios como para aferrarse, sino que se despojó a sí mismo, Él mismo, de su divinidad, para tomar forma de siervo en condición de hombre. Se humilló a sí mismo, Él mismo, para obedecer en todo a Dios, incluso hasta la muerte; no cualquier muerte, sino una muerte que sólo nosotros merecíamos padecer.

Jesús es el Único exaltado por Dios mismo, para que todos sometidos ante su Nombre, podamos vivir esa misma rendición y obediencia.