Año Nuevo, Hábitos NuevosMuestra

Claridad=Éxito

Todos sabemos que cuando nos encontramos a un amigo y le decimos frases como "Hay que tomarnos un café", o "Luego nos vemos" o "Te llamo en la semana'' en el fondo estamos pensando, "sí me gustaría tomar un café contigo, pero no tanto como poner fecha y hora".

La mayoría de las veces ninguno de esos cafés, citas o llamadas se concretan, y si alguno se logra concretar puede ser que sea meses después.

Esto sucede porque cuando no hay claridad en cuanto al tiempo y lugar es muy complicado que se dé una cita. Sería ridículo que le dijeras a tu amigo, "te estuve esperando en el centro comercial el lunes al medio día y nunca llegaste".

Él te diría que nunca quedaron en eso, y sería absurdo que argumentas tu respuesta diciendo "pero yo te dije que luego nos veíamos".

Lo mismo sucede cuando queremos adquirir nuevos hábitos, será muy complicado si no pones los detalles de cómo realizarás la nueva conducta que quieres practicar en tu vida.

Comienza a ser específico y planea tus nuevas metas en tiempos y momentos que sabes que ayudarán a que sucedan, como por ejemplo:

Meta 1

Haré ejercicio durante una hora, de lunes a viernes de 9 a 10 am después de desayunar en el gimnasio más cercano.

Meta 2

Comenzaré a leer la Biblia por la noche, antes de ver mi serie favorita por 15 minutos todos los días, además empezaré por el libro de Juan. No veré mi serie favorita si antes no leí la Biblia.

La claridad en cuanto a tus metas hará que tengas mayor probabilidad de éxito.

Cuando Dios pidió a Noé hacer un arca, no solo le dijo --Haz un arca--, después de pedirle que la hiciera, le dio todo tipo de especificaciones, como medidas de alto, ancho, largo, materiales, volumen, etc. Y no es el único ejemplo de Dios siendo claro para que alguno de sus siervos cumpliera un objetivo, Dios fue claro con Abraham cuando le pidió dejar su tierra, fue claro con Moisés cuando le pidió construir el tabernáculo, etc.

Te reto a que en este nuevo año comiences a ser más específico en tus metas, recordando que la claridad es parte del carácter de Dios.