La elección de David Muestra

Eres especial 

Tú y yo somos como David. Somos parte de las improbabilidades. David fue sacado de los campos, Dios lo movió a lugares más altos. Los hermanos de David, las opciones obvias, están en todas partes. Los que son como David son especiales. No seas celoso, sé fiel.

No estoy molestando a personas fuertes y altas como los hermanos de David. Aquí siempre habrá alguien más alto que tú. Hay alguien financieramente mejor que tú. Hay alguien con habilidades más avanzadas que tú. Otros pueden saber más que tú. Siempre podemos mirar hacia el siguiente carril y preguntar: «Señor, ¿por qué no me diste lo que otros tienen?». La respuesta es porque Dios te ha hecho único. Aunque otros pueden ser más inteligentes, bonitos o fuertes que tú, continúa siendo quién eres. Eres especial. Sé fiel a Dios y no permitas que la comparación o los celos se apoderen de tu corazón. 

Dios sabía exactamente dónde encontrar a David. Envió a Samuel a encontrarlo y lo ungió. Dios puso a David en el trono. Podemos ver el exterior, pero Dios ve el corazón. La clave para la reconciliación es ver el corazón. La clave para no pelear todo el tiempo en tu matrimonio es ver el corazón. La clave para entender a tus hijos en sus diferentes etapas es ver su corazón. 

Dios ve tu corazón y el mío. Él sabe lo que está pasando dentro de tu mente y alma. Puedes fingir delante de otros, pero Dios lo sabe. 

Amy Carmichael dijo: «Puedes dar sin amar, pero no puedes amar sin dar». Dios sabe que no se puede amar verdaderamente sin dar; por lo tanto, veamos el corazón de las personas y demos amorosamente a los demás.

Cuando Isaí, padre de David, envió por él, la Escritura dice que el Señor le dijo a Samuel que lo ungiera, porque David era el que Dios había elegido para ser el próximo rey. Dios lo tenía listo. Él sabe dónde estás y puede colocarte donde él quiere que estés. Él puede moverte en un abrir y cerrar de ojos. Puedes ser miserable o no gustarte dónde te encuentras en la vida en este momento; sin embargo, continúa siendo fiel en ese campo y espera que Dios determine a dónde te llevará. Nunca sabes cuándo va a cambiar tu vida. Dios encontró a David en un campo y su vida cambió en un día. Confía en el Señor, ya que él quiere grandes cosas para tu vida.