Mírate Bonita, Mírate FelizMuestra

Matrimonios imperfectos pero correctos

La primera tarea que tiene una pareja de recién casados es adaptarse el uno al otro. O sea, adaptarse a una persona independiente y diferente a uno mismo para conformar con ella una unidad, pero sin perder su propia individualidad.

Debemos comprender que un matrimonio lo conforman dos personas totalmente diferentes, con dos escuelas, costumbres y orígenes distintos, pero que tienen todo el derecho de conocerse y unirse. Es cierto: las Escrituras no nos dan instrucciones sobre cómo tener un buen noviazgo, ser una buena novia o elegir un buen novio; pero de lo que sí nos hablan es de compromiso, respeto y afecto entre dos personas en matrimonio, con un mismo propósito para Dios.

Si estás casada, te invito a reflexionar: ¿qué situaciones atraviesa tu matrimonio que estás dispuesta a tolerar?, ¿qué situaciones no estás dispuesta a tolerar?, ¿qué hace falta de parte de ambos para conformar un matrimonio correcto, aunque no sea perfecto?.