[Grandes versos] Los diez mandamientos: Una expresión de la Palabra Muestra

Decir la verdad

Aunque Dios usa el vocabulario de los tribunales de justicia en el noveno mandamiento, él nos está llamando a decir la verdad de todas maneras. Eso le importa a Dios. Él es alguien que siempre dice la verdad y es un amante de la verdad. Mentir es un fracaso del amor, porque mentir arruina las relaciones y destruye los hilos de confianza que unen a las personas.

Podemos mentir de diferentes maneras. Cuando inflamos historias o currículums, mentimos para impresionar a la gente. Si tenemos miedo de ser honestos y no estamos de acuerdo con una persona fuerte, entonces mentimos para complacer a la gente. También podemos mentir para obtener ganancias si engañamos a un cliente o hacemos afirmaciones falsas en la publicidad. Cuando calumniamos, mentimos para desacreditar a alguien.

Una razón importante por la que mentimos es solo para evitar problemas o castigos. En otras ocasiones, la gente miente por conveniencia. Por ejemplo, si llamamos al trabajo y decimos que estamos enfermos cuando no lo estamos, también cuando decimos que hemos enviado un paquete, pero no lo hemos hecho. También están las pequeñas mentiras de exageración. Pero no importa la forma de nuestra deshonestidad y duplicidad, Dios nos llama a dejar de mentir para decir la verdad. Él sabe que cada mentira envenena las relaciones humanas y erosiona nuestro carácter.

Dios odia mentir y se deleita en decir la verdad. Aunque la deshonestidad sea extremadamente común, debemos obedecer a Dios, declarar una guerra espiritual total a las diferentes maneras de mentir y decidir que seguiremos los pasos de nuestro Dios que dice la verdad en lugar de seguir los pasos de Satanás, que es el archienemigo y el padre de las mentiras. ¡Di la verdad!