Logo de YouVersion
Ícono Búsqueda

Información del Plan

Fe, Más Que PerfecciónMuestra

Fe, Más Que Perfección

DÍA 15 DE 30




Semana 3 - Día 5


Lectura: Génesis 21:8–21; Gálatas 3:23–29, 4:21–31


DEVOCIONAL: Gálatas 3:23–24


“Antes de venir la fe, estábamos encerrados bajo la ley, confinados para la fe que había de ser revelada. De manera que la ley ha venido a ser nuestro guía para conducirnos a Cristo, a fin de que seamos justificados por la fe.”






Sarah temía que Ismael de alguna manera le quitara la bendición prometida a su hijo. Su incredulidad la volvió contra Agar e Ismael, lo que obligó a Abraham a despedirlos. Aunque Abraham se entristeció, sus acciones muestran su fe continua en la promesa de Dios. Dios le prometió a Abraham que haría de Ismael una gran nación. Si bien Isaac sería el verdadero heredero del pacto, Dios aún hizo la promesa de bendecir a Ismael. Al despedir a Ismael y Agar con sólo comida y agua, Abraham mostró fe. Abraham podría haber despedido a Ismael con hasta la mitad de sus manadas, rebaños y siervos, pero en cambio, confió en que Dios los proveería. En lugar de confiar en sus propios medios, confió en Dios.


Dios también cumplió Su promesa a Agar. La encontró en el desierto una vez más, salvándola a ella y a su hijo. Dios mostró Su gran compasión por Agar y por todos aquellos que han sido echados, abandonados y abusados. Él es el Dios que ve.


Después del nacimiento de Isaac, la presencia de Agar e Ismael en el campamento fue una continua amenaza para la promesa. Aunque nunca estuvo en peligro porque estaba bajo el control de Dios, una vez que Isaac naciera, la promesa se cumpliría plenamente a través de él. Dios eliminó todo lo que fuera una amenaza para la bendición que vendría a través de Isaac.


Jesucristo es la bendición prometida, la forma en que todas las naciones del mundo fueron bendecidas por medio de Abraham. Antes de Cristo, el pueblo de Dios estaba bajo la ley y debía caminar sin mancha ante Él. Debido a Cristo, el antiguo orden ha sido eliminado. Ya no estamos bajo la ley. La promesa ha venido por medio de Cristo, no por la ley. Somos coherederos de la promesa por medio de Cristo. A medida que eliminamos cualquier cosa de nuestras vidas que pueda obstaculizar la promesa (pecado, legalismo, etc.), crecemos en nuestra relación con Cristo. Pablo nos recuerda en Gálatas que cuando nos atamos a la ley, estamos negando el cumplimiento de la promesa a través de Cristo. Él es el único heredero, y solo Él nos da la libertad. Ahora, en Cristo, somos justos por la fe, no por la ley.





Oración


Señor Jesús, solo Tú salvas. Admito que trato de alcanzar mi propia salvación a través de mis obras, pero creo que mi salvación es solo a través de la fe. Ayúdame a desechar cualquier cosa que me impida caminar en fe y creer en Tu promesa de vida eterna contigo. Amén.







Día 14Día 16

Acerca de este Plan

Fe, Más Que Perfección

¿Qué requiere Dios de nosotras? Es una pregunta con la que todas lidiamos, creyendo que hay algo que deberíamos hacer por Dios para ganar Su aprobación de una vez por todas. Lo único que Dios nos pide es nuestra fe. Fe m...

More

Nos gustaría agradecer a Love God Greatly - Spanish por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: https://lovegodgreatly.com/spanish/

YouVersion utiliza cookies para personalizar su experiencia. Al usar nuestro sitio web, acepta nuestro uso de cookies como se describe en nuestra Política de privacidad