Fortalezas y Debilidades en nuestro matrimonio

Un matrimonio, un solo pensar, una misma dirección; meditemos: “Por tanto, dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y serán una sola carne” (Génesis 2:24)

Hace un tiempo, experimentamos algo peculiar, nos habíamos postrado a orar y aunque sabíamos que pedir, cada uno lo hizo con un enfoque diferente. Esto nos llamó la atención ya que entendimos que teníamos una debilidad y debíamos unir nuestros corazones, pedir como uno solo y así hacer de la oración una fortaleza

Como dice la palabra, porque si uno de ellos cae, el otro levantará a su compañero, y no solo eso, sino que donde dos se pusieren de acuerdo le será hecho por el Padre que está en los cielos

Cuando nos encontramos bajo pruebas, solemos reaccionar de formas tan diferentes y eso es dañino para nuestra relación: ¿hemos sido perseverantes conforme a la voluntad de Dios? ¿hemos sido ese apoyo fuerte para nuestro cónyuge en momentos de debilidad? 

incluso en tiempos de dificultad, ¿nos hemos puesto de acuerdo en un mismo sentir? Como matrimonio debemos analizar cuáles son nuestras fortalezas y debilidades. 

¡Qué El Espíritu Santo los acompañe siempre!

Emerson y Diana Marroquín