Las Preguntas Más ImportantesMuestra

Todos hemos tenido días desafiantes. Un día difícil puede variar desde avergonzarse frente a los demás, hasta una ruptura o la muerte de un ser querido. Los días difíciles pueden hacernos cuestionar la bondad o el amor de Dios por nosotros. Este versículo nos recuerda que Dios hace que todo funcione para bien, tanto en los días buenos como en los malos. 

El poder de Dios puede tomar nuestro fracaso, nuestro quebranto, nuestro dolor, nuestra traición y eventualmente sacar algo bueno de ello. Nada puede detener los propósitos que Dios tiene para ti, ni siquiera tus peores días. 

¿Dónde deseas ver a Dios obrar para bien en tu vida ahora mismo? Acude a Dios en oración con ese deseo.