Obra impulsada por el Evangelio en la criis de COVID-19Muestra

Aislamiento a través del encarcelamiento no era parte de los planes de Pablo.

A primera vista, su encarcelamiento debe haber parecido una interrupción en sus intentos de difundir el evangelio a través de su trabajo como fabricante de carpas y predicador. Pero Pablo declaró muy claramente "lo que me ha sucedido realmente ha servido para avanzar el evangelio" (Filipenses 1:12).

¿Cómo? Como lo deja claro Filipenses 1:13, el evangelio pudobrillar precisamente porque le dio a Pablo la oportunidad de mostrarlo, independientemente de ls circunstancias, él estaba finalmente "encadenado por Cristo," encadenado voluntariamente a la soberanía de Dios.

Esa esperanza en el contexto de las circunstancias de Pablo debe haber parecido de otro mundo para "toda a guardia del palacio." Por lo tanto, ellos también llegaron a comprender el evanelio.

¿Qué aplicación podemos obtener de este texto mientras usted y yo trabajamos y vivimos en un relativo aislamiento? Nosotros, omo Pablo, tenemos oportunidades únicas para demostrar la esperanza del evangelio, no a pesarde las circunstancias, sino precisamente porellas. ¿Cómo?

Al mostrar que estamos preocupados, pero no ansiosos. ¿Tenemos motivos para preocuparnos por el coronavirus? Por supuesto. ¿Tenemos motivos para estar ansiosos? absolutamente no, porque tenemos "La paz de Dios, la cual trasciende todo entendimiento" debido a Cristo y su promesa de redención para nosotros y el mundo (Filipenses 4:7). En este momento de gran inseguridad, nuestro máxima seguridadpuede hacer que el evangelio sea agradable para nuestros compañeros de trabajo, clientes y amigos.

Al demostrar una atención poco común por aquellos alrededor nuestro.Ahora más que nunca, los seguidores de Cristo deberían ser los que demuestren una preocupación extraordinaria por las personas con las que trabajamos, más alla del "valor" que brindan a nuestras empresas o equipos. Este es un momento en el que hacer preguntas personales sobre la familia y la salud no solo es aceptable, sino senciblemente humano. Seamos compañeros de trabajo conocidos por preocuparse profundamente por las "personas completas" con las que trabajamos cada día.

Al compartir nuestra esperanza explícitamente.Las dos sugerencias anteriores pueden servir como pistas para el evangelo como muestra de nuestra máxima motivación para amar a nuestro prójimo, pero en algún momento, debemos compartir el evangelio con nuestras palabras. Ahora es un buen tiempo como cualquier otor. Las personas en nuestras oficinas virtuales y vecindarios anhelan la esperanza más que nunca. Esperanza para el mundo. Esperanza para su trabajo. Esperanza para ellos mismo. Como Cristianos, tenemos la vacuna espiritual que puede proporcionar esa esperanza para siempre. ¡Seamos lo suficientemente valientes como para compartirlo y "proclamar el evangelio sin temor" (Filipenses 1:14)!