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Manteniendo la salud física
El amor es agotador. Amar de verdad es un trabajo. Muchos no entienden que su condición física impacta sus relaciones y su habilidad de amar.
¿Qué pasa con tus relaciones cuando estás agotado? Las cosas pequeñas pueden convertirse en grandes problemas si estás cansado. Estás malhumorado, a la defensiva y eres más crítico si estás físicamente mal.
¿Cuáles son algunos de los hábitos que la Biblia dice que te refrescarán físicamente?
Descanso - "De nada sirve que ustedes madruguen y que se acuesten muy tarde, si el pan que comen es pan de sufrimiento, y el Señor da el sueño a los que él ama" (Salmos 127:2 RVC). Lo más espiritual que podemos hacer es descansar. Es asombroso lo bien que se ven las cosas después de un buen descanso. Muchos están muy cansados para amar a sus hijos y a su cónyuge.
Dieta balanceada - "Tú, con tus propias manos me formaste; dame la capacidad de comprender tus mandamientos" (Salmos 119:73 RVC). Elegir frutas y verduras antes que papitas fritas y galletas nos dará más energía duradera.
Ejercicio Regular - "Honren con su cuerpo a Dios" (1 Corintios 6:20 NVI). Nuestros cuerpos han sido hechos para estar en actividad. En tiempos de la Biblia no tenían que hacer ejercicio; caminaban a todas partes y hacían trabajo físico. Pero la mayoría de nosotros tenemos vidas sedentarias y vamos a todas lados en auto. Sólo tienes dos opciones en la vida: estar cansado o estar en forma. Estar en forma implica hacer ejercicio regularmente.
Acerca de este Plan
¿Sabes para qué te creó Dios? ¿Conoces el destino de Dios para tu vida? Si no sabes las respuestas a estas preguntas, entonces puedes ir a la deriva durante los próximos diez años de tu vida sólo viviendo, en lugar de vivir una Década del Destino en la que seas capaz de hacer lo que Dios te llama a hacer. Estos devocionales de Rick Warren te ayudarán a llegar a donde Dios quiere que vayas espiritual, financiera, emocional, relacional y físicamente. Ofrecen pasos prácticos para alcanzar las metas que Dios tiene para ti mientras sigues a Jesús en tu destino.
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