Devocional diario de Rick WarrenMuestra

Sigue desarrollando tus habilidades

Si no ejercitas tus músculos se debilitan y se atrofian, de la misma manera si no aplicas las habilidades y destrezas que Dios te ha dado las perderás. Jesús enseña la parábola de los talentos para enseñarnos que esto es cierto. Refiriéndose al siervo que se rehusó a usar una de sus monedas, el Maestro dijo: "Quítenle las mil monedas y dénselas al que tiene las diez mil" (Mateo 25:28 NVI).

Al no usar aquello que se te ha dado, lo perderás. Utiliza esa habilidad y Dios te la multiplicará.

Cualquiera sea tu talento lo puedes aumentar y desarrollar con la práctica. Por ejemplo, nadie tiene el don de la enseñanza desarrollado completamente, pero con estudio, retroalimentación y práctica, un "buen" maestro se puede convertir en uno mejor.

Expándete y aprende todo lo que puedas. Aprovecha cada oportunidad de entrenamiento para desarrollar tu forma y afila las habilidades de servicio.

En el cielo, todos serviremos a Dios para siempre. Podemos prepararnos para el servicio eterno practicando en la tierra. Así como los atletas se preparan para las olimpiadas, mantente entrenando para el gran día. "Todos los deportistas se entrenan con mucha disciplina. Ellos lo hacen para obtener un premio que se echa a perder; nosotros, en cambio, por uno que dura para siempre" (1 Corintios 9:25 NVI).