Orando por su elefante - haciendo oraciones audacesMuestra

Tesoro sumergido El libro de Santiago dice, "Ustedes no tienen porque no piden". Para ilustrar este pasaje, hay un relato de un niño pequeño que tuvo un sueño con el cielo. En el sueño, Dios llevó al niño a un cuarto. En el cuarto había diferentes tipos de bienes materiales como carros, casas, y otros objetos necesarios para el diario vivir. También en el cuarto había cosas que parecían grotescas: ojos, piernas, manos, y pies amontonados en las esquinas. Cuando el pequeño niño le preguntó a Dios qué significaba todo eso, Dios le respondió, "Éstas son las respuestas a oraciones nunca hechas". Aunque esta historia no es real, lleva un profundo mensaje. La moraleja de la historia es bíblicamente precisa. La gente no tiene muchas de las cosas que Dios tiene para sus vidas por una sencilla razón: ellos nunca pidieron. Como un tesoro sumergido ensuciando el fondo del mar, las respuestas de Dios a las oraciones no hechas se quedan sin descubrir y se pierden. ¿Qué hay de usted? ¿Hay algo del tesoro de su vida descansando en la profundidad con los galeones españoles bajo la superficie de su vida esperando a que el trabajo de salvamento de la oración los saque a flote? ¿Se está perdiendo de lo que Dios quiere para su vida porque nunca ha pedido?