Sumérgete en el río de DiosMuestra

Somos piezas únicas

Así como yo llevo 36 años estudiando la Palabra, hay otras personas que llevan 50 años, quizás a lo mejor tú llevas dos años, tres años, cuatro años; pero la buena noticia es que vamos a describir el río de Dios y vamos a ver hasta dónde tienes que llegar. A lo mejor sientes que es muy poco el tiempo que llevas en Él, y el conocimiento que tienes acerca de la Biblia; no te preocupes, vas a ir creciendo.

Nunca menospreciemos los momentos pequeños, el comienzo de todo, porque Dios tiene algo grande. El crecimiento y desarrollo en todas las áreas de nuestra vida es vital, imagínate que dejas de crecer, o un niño deja de crecer; ¿en que se convertiría?, ¿tienes alguna idea?; ¡en un enano, obvio! Un enano, es una persona que no desarrolló el 100% de su cuerpo, y desgraciadamente existen enanos espirituales; dicen: ¡yo ya no quiero crecer, no quiero aprender más!, a lo mejor piensan: ¡yo ya se todo!, y simplemente en su propia perspectiva, ellos se ven como un gigante; pero en realidad no han crecido.

Cuando no creces, hay límites; yo tengo un ropero y en él me gusta poner mis botas en la parte de arriba, en casa hay gente más baja que yo y no pueden alcanzarlas. Doy gracias a Dios, no soy alto y puedo alcanzar esas botas. Hay cosas que están arriba, y muchas veces por nuestra deficiencia de altura, no las podemos alcanzar. Quiero darte buenas noticias, todos podemos crecer, todos podemos sumergirnos en ese río de Dios; y vamos a aprender acerca de ello.

El cuerpo de Cristo es la iglesia, tú eres parte del cuerpo de Cristo. La iglesia no es un lugar físico, no es ese lugar bello que Dios te ha dado para que te congregues; la iglesia está por todo el mundo y es la expresión de un cuerpo: Cristo. Hay diversas expresiones o maneras, en las cuales puedes decidir crecer en Dios; sin embargo, te ha puesto en un lugar específico para crecer. De acuerdo a lo que nosotros, los ministros competentes estamos entendiendo, queremos enseñarte, y dentro de lo que enseñamos, afirmamos que eres una persona muy importante dentro del cuerpo de Cristo.

Por eso es importante que tu desarrollo crezca al máximo, eres tan importante que es vital que crezcas, eres tan importante que eres una pieza primordial dentro de este rompecabezas que se llama «cuerpo de Cristo», eres tan importante que eres una pieza única; ¿han visto un rompecabezas? cada pieza es única, así mismo eres tú, no hay nadie como tú; ¡eres único!