Salmos 44:6-8
Salmos 44:6-8 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
Yo no confío en mi arco ni puede mi espada darme la victoria; tú nos das la victoria sobre nuestros enemigos, y dejas en vergüenza a nuestros adversarios. ¡Por siempre nos gloriaremos en Dios! ¡Por siempre alabaremos tu nombre! Selah
Salmos 44:6-8 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
6 (7) Yo no pondría mi confianza en mi arco y en mis flechas, ni pensaría que mi espada podría darme la victoria; 7 (8) ¡fuiste tú quien nos hizo vencer a nuestros enemigos!, ¡fuiste tú quien puso en vergüenza a nuestros adversarios! 8 (9) Dios nuestro, ¡siempre te alabaremos!, ¡siempre te daremos gracias!
Salmos 44:6-8 Reina Valera Contemporánea (RVC)
Yo no confiaría en mis flechas, ni tampoco mi espada podría salvarme; pero tú puedes salvarnos de nuestros enemigos, y poner en vergüenza a los que nos odian. ¡En ti, Dios nuestro, nos gloriaremos siempre, y nunca dejaremos de alabar tu nombre!
Salmos 44:6-8 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
6 (7) Porque no confiaría yo en mi arco, ni mi espada podría darme la victoria; 7 (8) fuiste tú quien nos hizo vencer a nuestros enemigos, quien puso en ridículo a los que nos odiaban. 8 (9) ¡Siempre estaremos orgullosos de ti, oh Dios, y siempre alabaremos tu nombre!
Salmos 44:6-8 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
Porque no confiaré en mi arco, Ni mi espada me salvará; Pues tú nos has guardado de nuestros enemigos, Y has avergonzado a los que nos aborrecían. En Dios nos gloriaremos todo el tiempo, Y para siempre alabaremos tu nombre. Selah
Salmos 44:6-8 La Biblia de las Américas (LBLA)
Porque yo no confiaré en mi arco, ni me salvará mi espada; pues tú nos has salvado de nuestros adversarios, y has avergonzado a los que nos aborrecen. En Dios nos hemos gloriado todo el día, y por siempre alabaremos tu nombre. (Selah)
Salmos 44:6-8 Nueva Traducción Viviente (NTV)
No confío en mi arco ni dependo de que mi espada me salve. Tú eres el que nos da la victoria sobre nuestros enemigos; avergüenzas a los que nos odian. Oh Dios, todo el día te damos gloria y alabamos tu nombre constantemente. Interludio