Obedecimos al SEÑOR nuestro Dios y salimos de Horeb rumbo a la región montañosa de los amorreos. Cruzamos todo aquel inmenso y terrible desierto que ustedes han visto, y así llegamos a Cades Barnea. Entonces les dije: «Han llegado a la región montañosa de los amorreos, la cual el SEÑOR nuestro Dios nos da. Miren, el SEÑOR su Dios les ha entregado la tierra. Suban y tomen posesión de ella como les dijo el SEÑOR, el Dios de sus antepasados. No tengan miedo ni se desanimen». Pero todos ustedes vinieron a decirme: «Enviemos antes algunos de los nuestros para que exploren la tierra y nos traigan un informe de la ruta que debemos seguir y de las ciudades en las que podremos entrar». Su propuesta me pareció buena, así que escogí a doce de ustedes, uno por cada tribu. Los doce salieron en dirección a la región montañosa; llegaron al valle de Escol y lo exploraron. Tomaron consigo algunos de los frutos de la tierra, los trajeron y nos informaron lo buena que es la tierra que nos da el SEÑOR nuestro Dios. SEÑOR Sin embargo, ustedes se negaron a subir y se rebelaron contra la orden del SEÑOR su Dios. Se pusieron a murmurar en sus tiendas de campaña y dijeron: «El SEÑOR nos aborrece; nos hizo salir de Egipto para entregarnos a los amorreos y destruirnos. ¿A dónde iremos? Nuestros hermanos nos han llenado de miedo, pues nos informan que la gente de allá es más fuerte y más alta que nosotros, y que las ciudades son grandes y tienen muros que llegan hasta el cielo. ¡Para colmo, nos dicen que allí vieron anaquitas!». Entonces respondí: «No se asusten ni les tengan miedo. El SEÑOR su Dios marcha al frente y peleará por ustedes, como vieron que lo hizo en Egipto y en el desierto. Por todo el camino que han recorrido, hasta llegar a este lugar, ustedes han visto cómo el SEÑOR su Dios los ha guiado, como lo hace un padre con su hijo». A pesar de eso, ninguno de ustedes confió en el SEÑOR su Dios, que se adelantaba a ustedes para buscarles dónde acampar. De noche lo hacía con fuego, para que vieran el camino a seguir, y de día los acompañaba con una nube. Cuando el SEÑOR oyó lo que ustedes dijeron, se enojó e hizo este juramento: «Ni un solo hombre de esta generación perversa verá la buena tierra que juré dar a sus antepasados.
Leer Deuteronomio 1
Escuchar a Deuteronomio 1
Compartir
Comparar todas las versiones: Deuteronomio 1:19-35
7 Dias
La estación en el desierto a menudo nos hace sentir perdidos, abandonados y desamparados. Sin embargo, lo interesante del desierto es que cambia la perspectiva, transforma la vida y forma la fe. Mientras haces este plan, mi oración es que no te resientas en el desierto, sino que aceptes y permitas que Dios haga Su mejor trabajo en ti.
20 dias
Deuteronomio resume la buena ley de Dios y enseña que la obediencia es nuestra respuesta a su amor. Viaja diariamente a través de Deuteronomio mientras escuchas el estudio en audio y lees versículos seleccionados de la palabra de Dios.
28 dias
Caminar con Jesús permitió a los discípulos experimentar, de primera mano, la compasión y la gracia de Dios en acción. Caminar con Jesús hoy, no debería ser diferente. Su compasión y su gracia siguen disponibles para quien quiera experimentarlas. En este plan de 4 semanas te encontrarás con distintos personajes confrontados con el amor, la compasión y la gracia del Dios eterno, manifestados a través de su Hijo.
30 Dias
¡Estudia la Biblia mes a mes! La Palabra es esa luz que ilumina tu camino, tus acciones y tus decisiones en este año. Únete a este plan donde exploraremos cada día diferentes versículos, en la medida que lo desarrolles podrás conocer el propósito de Dios para tu vida.
¡Guarda versículos, lee sin conexión, mira videos didácticos y más!
Inicio
Biblia
Planes
Videos