Las Fortalezas EspiritualesSample

Destructor de fortalezas
Jesús nos enseña a observar todo lo que nos ha mandado y nos asegura diciendo: «Yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo». Estas palabras nos recuerdan que la enseñanza y el crecimiento en el conocimiento de la Palabra de Dios son procesos que nunca terminan. La búsqueda continua de comprensión y el deseo de mejorar nos llevan a examinar las razones por las que no siempre actuamos como deberíamos. La Palabra de Dios siempre tiene una respuesta para cada dificultad que enfrentamos, y a veces la solución es más sencilla de lo que pensamos.
Sin embargo, en ocasiones, cuando encontramos obstáculos o dificultades, podemos perder el entusiasmo por las cosas buenas que estamos haciendo. Retroceder o rendirse no nos dará la constancia que necesitamos para servir al Señor con todo el corazón. Lo primero que debemos hacer cuando nos sentimos desanimados es orar, pidiendo a Dios que nos ayude a superar las dificultades y a renovar nuestra pasión por lo que hacemos para Él.
Pablo ora por los Filipenses para que seamos «llenos de frutos de justicia, que se obtienen por medio de Jesucristo, para gloria y alabanza de Dios» (Filipenses 1:11 RVR). Ser justos no siempre es fácil, pero con la ayuda de Jesucristo y del Espíritu Santo, podemos vivirlo. La justicia que Dios nos pide no es algo que podamos alcanzar con nuestras fuerzas, sino un fruto que nace de la relación con Cristo y de Su intervención en nuestra vida.
Finalmente, Pablo nos exhorta a revestirnos de sentimientos de misericordia, bondad, humildad, mansedumbre y paciencia, cualidades que son fundamentales para vivir como verdaderos discípulos de Cristo. No es fácil, pero con Su ayuda podemos crecer cada día, perseverando y dando frutos de justicia que glorifiquen a Dios.
About this Plan

Las fortalezas espirituales son barreras mentales, emocionales y espirituales que bloquean el plan de Dios en nuestras vidas. Surgen de experiencias dolorosas, creencias erróneas o pecados no confesados, dando al enemigo un punto de apoyo para frenar nuestro crecimiento espiritual. Derribarlas es vital para vivir la libertad que Cristo ofrece. A través de la Palabra de Dios, la oración y la acción del Espíritu Santo, podemos destruir estas mentiras y permitir que la verdad transforme nuestra mente, conduciéndonos a una comunión plena con Dios.
More
Related Plans

The Holy Spirit: God Among Us

Positive and Encouraging Thoughts for Women: A 5-Day Devotional From K-LOVE

Who Am I, Really? Discovering the You God Had in Mind

Reimagine Influence Through the Life of Lydia

Gospel-Based Conversations to Have With Your Preteen

Never Alone

The Bible in a Month

Everyday Prayers for Christmas

Sharing Your Faith in the Workplace
