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La generosidad puede tomar la forma de muchas cosas diferentes. Puedes ser generoso con tu tiempo, tus habilidades, tu dinero o incluso con la forma en que animas a los demás. Mostrar generosidad a las personas que nos rodean nos ayuda a dar un ejemplo del carácter de Jesús. Dar de lo que tenemos para ayudar a quienes lo necesitan no siempre es una tarea fácil. Se necesita sacrificio y, a veces, duele renunciar a lo que queremos por otras personas. Sin embargo, cuando encontramos formas de ser generosos, comenzamos a ver una mejor imagen de cómo era Jesús. 

Mira a tu alrededor hoy para tener la oportunidad de ser generoso con otra persona.