30 días de salud emocionalSample

¿Qué hiciste en secreto? Es reconfortante y convincente que Jesús ha visto nuestros momentos de soledad. Me pregunto, ?qué estaría haciendo Natanael debajo de la higuera? ¿Estaba durmiendo? ¿Rezando? ¿Luchando con sus pensamientos? Fuera lo que fuera, pensó que estaba solo. Pero no era cierto. El Hijo de Dios, Jesús, lo vió. Pienso en todos los tiempos en mi juventud que pensé que nadie me estaba mirando. En ese entonces, no conocía el corazón de Dios y no pensaba que estaba en Su vista. Así que hice lo que quería, cuando quería, y no creía que a Dios le importara. Pero el primer capítulo de Juan indica que me vió allí, y que yo le importaba. Él nos ve mientras estamos atrapados en el pecado y nos dirija cuando le pedimos ayuda a Él. ¡Alabado sea el Señor! Él también nos ve en nuestro dolor. He llamado a Dios en oración durante la incertidumbre o la tragedia. Incluso cuando somos fieles, es fácil sentirse invisible. Pienso en Jesús acercándose a cada uno de nosotros en nuestro sufrimiento y diciendo: “Sé que piensas que estás sola, pero te veo en tu necesidad. Ya vi esta situación antes de que ni siquiera pensaste orar por esto. Estoy contigo." Hay algo especial de tener un Dios que conoce toda nuestra historia, buena y mala, y que todavía nos desea. Él dice: “Sí, te vi allí en tu pecado y en tu duda. Te vi allí en tus heridos y dolores. Y te estoy pidiendo que te pongas de pie y que me sigas." Cuando lo hacemos, recibimos Su paz aunque es invisible y inexplicable - en Su presencia. ¿En qué áreas de tu vida te sientes sola? Confía en que Jesús te ve donde estás y siempre estará contigo. ~ Andrea Chatelain