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No creas todo espíritu
“Amados, no creáis a todo espíritu, sino probad los espíritus si son de Dios; porque muchos falsos profetas han salido por el mundo”. (1 Juan 4:1 RVR1960)
El amor no nos exime del discernimiento; lo exige.
Debemos probar las enseñanzas y experiencias espirituales para ver si realmente provienen de Dios.
Juan advierte que no toda enseñanza “espiritual” proviene de Dios. Vivir en el amor no significa ingenuidad, sino madurez espiritual. El discernimiento es una expresión de amor hacia la verdad (Filipenses 1:9).
Los falsos profetas no siempre niegan abiertamente a Cristo; a menudo lo reinterpretan, diluyendo su señorío o distorsionando su obra. Por eso Juan nos llama a probar los espíritus, a evaluar las voces que pretenden hablar en nombre de Dios.
La fe auténtica no se fundamenta en emociones o apariencias, sino en la verdad revelada en la Escritura. Probar implica comparar todo mensaje con el carácter y la palabra de Cristo (Hechos 17:11).
El discernimiento espiritual protege el corazón y mantiene la comunidad en la luz.
¿Eres capaz de reconocer cuándo una enseñanza o influencia espiritual no refleja el verdadero carácter de Cristo?
Escrituras
Acerca de este Plan
Este devocional nos guía por el llamado apostólico a discernir los espíritus y permanecer en la verdad de Cristo. A través de 1 Juan 4:1–6, aprendemos a identificar las voces que no provienen de Dios, a probarlas mediante la confesión de Cristo, a confiar en la victoria del Espíritu que mora en nosotros y a permanecer firmes en la verdad que diferencia al mundo del Reino de Dios.
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Nos gustaría agradecer a Arnoldo Arana por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: leadershiftglobal.com
