De Sobrepensar Al Descanso Con DiosMuestra

Día 1: ¿Por qué no puedo dejar de pensar en eso?

¿Te pasa que algo te salió mal, o alguien te dijo algo, y lo repasas en tu cabeza una y otra vez? Esa repetición constante de pensamientos negativos se llama rumiación mental. Es como si la mente quedara atrapada en un ciclo que te desgasta emocionalmente.

La ciencia ha demostrado que la rumiación alimenta la ansiedad y la depresión, y produce estrés físico. Pero Dios no nos diseñó para vivir atrapados en pensamientos que nos paralizan.

En 1 Pedro 5:7, Él nos invita a entregarle nuestras preocupaciones. Dios no te pide que lo resuelvas todo en tu mente. Te pide que se lo entregues a Él. El primer paso hacia el descanso mental es reconocer que no podemos solos.

Oración

Señor, hoy reconozco que mi mente está cansada. Quiero aprender a soltar lo que me atormenta y confiarte mis pensamientos. Enséñame a dejar de rumiar lo que no puedo cambiar, y a entregártelo a Ti. Amén.