Devocional Agosto "Lámpara a Mis Pies"Muestra

“Dame ahora sabiduría y ciencia, para presentarme delante de este pueblo; porque ¿quién podrá gobernar a este tu pueblo tan grande?” (2 Crónicas 1:10 RVR1960).

¿Por qué esta oración de Salomón agradó tanto a Dios? No solo le dio lo que pidió, sino muchísimo más. El Señor, conociendo el corazón de Salomón, vio que el deseo de su corazón era ser excelente en la misión que le había encomendado. Dios le confió el pueblo de Israel y Salomón pidió sabiduría para poder cumplir su propósito con excelencia.

Todos fuimos llamados a una misión particular: puede que tengas una posición particular dentro de algún ministerio, o quizás fuiste llamado a pastorear a tu familia o a un grupo de personas en tu lugar de trabajo o estudio.

¿Qué tal si hoy dedicas un momento a pedir que Dios te capacite para que puedas hacer Su voluntad? Que seas excelente en lo que Dios te llamó a hacer. No pidas por tus necesidades (tu Padre en el cielo ya las conoce, confía en Él). Más bien, pide para que la voluntad de Dios sea hecha en la tierra, y que sea hecha por medio de ti.