Devocional Mayo "Lámpara a mis pies"Muestra

“Pues habiendo conocido a Dios, no le glorificaron como a Dios, ni le dieron gracias, sino que se envanecieron en sus razonamientos, y su necio corazón fue entenebrecido” (Romanos 1:21).

En el primer capítulo de Romanos, el apóstol Pablo explica el camino que tomó la raza humana, dejando a Dios de lado y entregándose a cometer toda clase de males. El primer paso de ese camino está descrito en el verso 21: A pesar de que Dios se reveló a los hombres, la mayoría decidió ignorar a Dios y no le dieron gracias por todo lo que recibían de Él. ¡La ingratitud se convirtió en la puerta que llevó a los hombres a alejarse cada vez más de Dios!

A veces pensamos que merecemos recibir cosas buenas y que Dios está obligado a hacernos bien; sin embargo, Él es el Creador y nosotros las criaturas —no nos debe nada—. Además, somos criaturas que nos rebelamos contra Él y lo único que merecemos es el juicio. Cada segundo que cada persona está viva es un regalo de Dios, cada placer pequeño o grande que disfruta es un regalo de Dios. Incluso si Dios no hace algo extraordinario por ti, tienes muchas razones para agradecerle; ahora, si piensas en todas las cosas que Dios ha hecho por ti como muestra de su amor y misericordia, se multiplican las razones.

Toma un tiempo para pensar en al menos 10 cosas que Dios haya hecho por ti esta semana y agradécele por ello.