Nunca Te Rindas (Secundaria)Muestra

Piensa en la última carrera en la que participaste o que viste. Tal vez fue una carrera de 500 metros en la clase de educación física o una carrera durante los Juegos Olímpicos. ¿Cómo hicieron todos esos corredores para acercarse a su objetivo de terminar esa carrera? ¡Siguieron avanzando! Lo mismo ocurre cuando se trata de nuestra fe. Cuando mantenemos nuestros ojos en Jesús, nos estamos enfocando en aquello a lo que Dios nos ha llamado: la carrera que Dios ha puesto delante de nosotros. A medida que avanzamos, desarrollaremos la resistencia para seguir adelante y crecer en la vida, sin importar lo que enfrentemos.

Hoy, tómate un tiempo para salir a caminar. Mientras das cada paso, piensa en la forma en que puedes avanzar en tu vida con los ojos puestos en Jesús y acercarte más a lo que Dios te ha llamado para hacer.