Logo de YouVersion
Ícono Búsqueda

Información del Plan

Pedir, Recibir, AgradecerMuestra

Pedir, Recibir, Agradecer

DÍA 1 DE 7

Dia 01 - A través de la oración podemos pedirle TODO a Dios. Y TODO significa verdaderamente TODO, no hay límites.


Reflexiones : 


Lea Mateo 21:22, Juan 15:7-8 y Juan 16:23-24 y tome un momento para responder las siguientes preguntas :


 ➤     ¿Cuáles son las cosas que podemos pedirle a Dios?


 ➤     ¿Cuáles son las condiciones dadas por Jesús para la respuesta de nuestras oraciones?


 ➤      En Mateo 6:9-13 como nos ensena Jesús a orar?


 


Contenido:


Cuando hablamos de oración, lo primer que debemos definir es que no se trata de un acto religioso o de recitar… La oración es un verdadero dialogo cuando hablamos con Dios. La palabra “orar“ significa simplemente “pedir”. Así que cuando Jesús nos ensena a orar, Él nos invita a dirigirnos a Dios pidiéndole cosas concretas, como, por ejemplo, nuestras necesidades básicas, el perdón de nuestras ofensas y la liberación del mal. Se trata de cosas simples, prácticas y cuantificadas.


Es posible que ya hayas notado que a veces, cuando ofrecemos a una persona orar por sus necesidades, nos responde: No gracias, es usted muy amable, no para mí, hay muchas otras personas que lo necesitan más que yo. Y si no estamos atentos, podemos pensar de la misma manera: incluso cuando oramos por nuestras necesidades, nos sentimos indignos de ser respondidos, tenemos la impresión de no merecerlo y vemos nuestras necesidades como insignificantes en comparación con las de las personas que nos rodean. Lo que nos lleva a preguntarnos, más o menos conscientemente: ¿Es que Dios tiene tiempo de pensar en mí? ¿No tiene ya que ver con todas esas solicitudes que le hacen todos los días?


Sin embargo, los que miramos la vida de Jesús, la cual es descrita en los evangelios, descubrimos una actitud totalmente diferente de la mencionada antes. En primer lugar, Jesús habla con Dios en una relación de intimidad, que es la de un hijo con su padre. Y no hay para Jesús absolutamente ninguna razón para que el Padre no le responda: No olvidemos que, habiendo aceptado a Cristo como nuestro Señor y Salvador, nos hemos convertido en hijos de Dios (Romanos 8:15). Por lo tanto, no solo podemos recurrir a Dios para nuestras necesidades, sino que es lo que Dios espera de nosotros. De hecho, Dios espera que nosotros nos acerquemos a Él con la misma libertad e intimidad que Jesús, para presentarle nuestras peticiones, pero también las de los otros. Dios no tiene límites, Él es Dios. Él puede, sin ningún problema responder al mismo tiempo a millares de personas de nuestro planeta y no solamente puede, sino que Él lo quiere.


Otra cosa: no pedirle a Dios para ti mismo, es mostrar falsa humildad, en realidad no es más que orgullo disfrazado, básicamente creer que uno puede valerse por sí mismo, sin Dios…


La oración es uno de los medios que Dios utiliza para desarrollar nuestra dependencia de Él y cuanto más oramos, más dependientes somos. Seamos esos que oran sin cesar. Además, cuando comenzamos a ver nuestras oraciones respondidas, nos convertimos en una bendición para aquellos por quienes oramos, lo que va a hacer de nosotros una solución para el mundo que nos rodea. Orar por uno mismo no es algo egoísta. Jesús nos enseno a orar: “danos el pan de cada día” …porque no podemos dar, lo que no hemos recibido… Y lo que hemos recibido, no podemos guardarlo para nosotros, sino que debemos compartirlo con los otros. El amor que el Espíritu Santo derramó en nuestros, también nos impulsara en esa dirección.


Por lo tanto, Jesús dice: Pedís todo lo que queréis… (Juan 15:7) y la Biblia nos ensena que no hay límites en lo que podamos pedir, podemos pedirle TODO a Él. Y sin embargo a veces tenemos este tipo de pensamiento: “Solo lo suficiente y no más” o “no demasiado para no arriesgarme a ser decepcionado”. Un poco como si Dios fuera pobre o que El no pudiera escucharnos. Eso es una mentira y la Biblia declara que Dios es rico para todos los que lo invocan (Romanos 10:12) y quiere escucharnos.


TODO quiere decir TODO y no hay límites en lo que podemos pedirle en nuestra relación de intimidad con Dios, en ese lugar de corazón a corazón con El y Su voluntad, se convierte en nuestra voluntad, donde Él nos revela Su poder. Su amor y Sus proyectos. Es porque conocemos Su voluntad y porque El coloca los deseos que nacen de El en nuestros corazones, que podemos pedirle TODO. De hecho, Jesús especifica bajo qué condiciones contesta nuestras oraciones: simplemente si permane cemos en Él y Sus palabras (es decir Su voluntad expresada) permanecen en nosotros.


En las meditaciones cotidianas siguientes, profundizaremos esta pregunta, pero de antemano es importante establecer en nuestro corazón esta fe, esta certeza de que podemos pedirle TODO a Dios, que no hay nada prohibido, ni límites, que no los podemos poner. Toma un tiempo para hablar con Dios y deja que te revele si hay áreas donde el TODO no es TODO. Luego arrepiéntete de tu incredulidad y confiesa con tu boca Su voluntad, es decir, que Él quiere darte Su voluntad que es, TODO.





Mi decisión


Lo que comprendí para mi vida personal:


Lo que decido para mi vida, con lo que acabo de aprender :


Lo que tú decides hoy, determina quien serás mañana :





Del libro "un disciple en marche" copyright 2018 de Luc Favre, publicado por Vie Victorieuse. Todos los derechos reservados.




Día 2

Acerca de este Plan

Pedir, Recibir, Agradecer

Orar no es un acto religioso, es un estilo de vida real ... el de nuestra relación íntima con Dios. Este plan te animará en tu caminar con Dios y liberará en ti una verdadera dimensión de fe.

Nos gustaría agradecer a Luc Favre por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite:  http://www.vievictorieuse.org

 

YouVersion utiliza cookies para personalizar su experiencia. Al usar nuestro sitio web, acepta nuestro uso de cookies como se describe en nuestra Política de privacidad