¡El Otro Huésped De Casa: El Internet! Muestra

 Honrar a Dios en lo secreto: pornografia  

Vemos a muchas personas habitantes de calle y pensamos: que fuerte fue aquel vicio que le dejó en esa condición. Vemos a otros muchos presos en las cárceles y creemos que seguro hicieron algo fuerte y violento que los llevó a esa condición. Ambos casos llegando al punto de perder su libertad, económica y física. 

¿Cuántos que “no salen a la luz aún” están hoy sumergidos en el vicio de la pornografía? Es un pecado igual de fuerte que el adicto a una droga, o el adicto a delinquir. Es un pecado igual ante los ojos de Dios, aunque no tenga la misma consecuencia aquí en la tierra. 

Cuando pecamos en lo oculto con un vicio como la pornografía siempre creemos lo mismo: esto lo puedo controlar, pero lastimosamente el “producto” está hecho para que lo vuelvas a necesitar, y así sucesivamente hasta llegar al punto donde te declares “adicto en lo secreto”. 

¿Cómo salir de ahí? Al igual que salimos de cualquier otro vicio: desintoxicación. Buscando ayuda profesional, ayuda espiritual, y tomando una determinación fuerte y clara. Dios no nos dejará caer en una tentación a la cual no podamos vencer, por más lejos que hayamos llevado ese camino, aún es tiempo de volver a comenzar. 

La pasión de la carne es momentánea, la pasión del espíritu es eterna. 

1 Juan 2:16 

Porque todo lo que hay en el mundo, la pasión de la carne, la pasión de los ojos y la arrogancia de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo