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OSEAS 1:2-11

OSEAS 1:2-11 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)

Cuando el SEÑOR comenzó a hablar por medio de Oseas le dijo: «Ve y toma por esposa una prostituta y ten con ella hijos de prostitución, porque el país se ha prostituido por completo. ¡Se ha apartado del SEÑOR!». Oseas fue y tomó por esposa a Gómer, hija de Diblayin, la cual concibió y dio a luz un hijo. Entonces el SEÑOR dijo: «Ponle por nombre Jezrel, porque dentro de poco haré que la casa real de Jehú pague por la masacre en Jezrel. Así pondré fin al dominio del reino de Israel. Ese día quebraré el arco de Israel en el valle de Jezrel». Ella volvió a concebir y dio a luz una niña. Entonces el Señor dijo a Oseas: «Ponle por nombre Lorrujama, porque no volveré a mostrar amor al reino de Israel, sino que le negaré el perdón. En cambio, mostraré mi amor al pueblo de Judá y la salvaré; pero no por medio de arco, ni de espada, ni de batallas, ni tampoco por medio de caballos y jinetes, sino por medio del SEÑOR su Dios». Cuando ella dejó de amamantar a Lorrujama, volvió a concebir y tuvo otro hijo. Entonces el Señor dijo a Oseas: «Ponle por nombre: Loamí, porque ustedes no son mi pueblo y yo no soy su Dios. »Con todo, los israelitas serán tan numerosos como la arena del mar, que no se puede medir ni contar. Y en el mismo lugar donde se les llamó Loamí, se les llamará “hijos del Dios viviente”. El pueblo de Judá se reunirá con el pueblo de Israel y nombrarán un solo jefe; resurgirán en su país, porque grande será el día de Jezrel.

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OSEAS 1:2-11 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)

Lo primero que Dios le dijo a Oseas fue lo siguiente: «Ve y cásate con una prostituta, y ten hijos con ella, porque los israelitas me abandonaron, y se comportaron como las prostitutas». Oseas obedeció y se casó con Gómer, la hija de Diblaim. Ella quedó embarazada y tuvo un hijo. Entonces Dios le dijo a Oseas: «El rey Jehú ha cometido muchos crímenes en el valle de Jezreel. Por lo tanto, en ese mismo valle derrotaré a su ejército. Castigaré a sus descendientes y acabaré con el reino de Israel. Por eso, a tu hijo le pondrás por nombre Jezreel». Tiempo después, Gómer volvió a quedar embarazada y tuvo una hija. Entonces Dios le dijo a Oseas: «A esta niña la llamarás Lo-ruhama, que quiere decir “no-compadecida”, porque no volveré a perdonar ni a tener compasión de los habitantes del reino de Israel. Solo tendré compasión de los habitantes del reino de Judá. Yo mismo los salvaré, y para eso no necesito ejércitos ni armas de guerra». Cuando Gómer dejó de darle pecho a Lo-ruhama, volvió a quedar embarazada; pero esta vez tuvo un hijo. Entonces Dios le dijo a Oseas: «A este niño lo llamarás Lo-amí, que quiere decir “no-mi pueblo”. Porque los israelitas ya no son mi pueblo y yo he dejado de ser su Dios. 10 (2.1) Pero un día los del reino de Israel volverán a ser como la arena del mar, que no se puede contar. »Cuando llegue ese día, ya no volveré a decirles: “Ustedes no son mi pueblo”; al contrario, les diré: “Ustedes son mi pueblo, porque yo soy el Dios de la vida”. 11 (2.2) Ese día será grandioso, pues yo les devolveré a los reinos de Judá y de Israel la grandeza que tuvieron. Volverán a ser una sola nación; tendrán un solo rey, y volverán a Jerusalén los que fueron llevados a otros países.

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OSEAS 1:2-11 Reina Valera Contemporánea (RVC)

La palabra del Señor vino a Oseas por primera vez, y le dijo: «Ve y toma por mujer a una prostituta, y ten hijos con ella, porque la tierra se ha prostituido. Se ha apartado del Señor.» Oseas fue y tomó por mujer a Gomer hija de Diblayin, la cual concibió y le dio a luz un hijo. Entonces el Señor le dijo: «Ponle por nombre Jezrel, porque dentro de poco tiempo voy a castigar a la casa de Jehú, por causa de los asesinatos cometidos en Jezrel. Voy a ponerle fin al reinado de la casa de Israel. Cuando llegue el día, haré pedazos el arco de Israel en el valle de Jezrel.» Gomer volvió a concebir, y dio a luz una hija. Entonces Dios le dijo a Oseas: «Ponle por nombre Lorrujama, porque no volveré a compadecerme de la casa de Israel, sino que los eliminaré por completo. Sin embargo, tendré misericordia de la casa de Judá, y los salvaré; pero no lo haré por medio de arcos ni espadas, ni por medio de combates con caballos y jinetes, sino por medio del Señor su Dios.» Después de que Gomer destetó a Lorrujama, esta concibió y dio a luz un hijo. Entonces Dios dijo: «Ponle por nombre Loamí, porque ustedes no son mi pueblo, ni yo soy el Dios de ustedes. Con todo, los hijos de Israel serán tan numerosos como la arena del mar, que no es posible medirla ni contarla. Y allí donde se les dijo: “Ustedes no son mi pueblo”, se les dirá: “Ustedes son hijos del Dios de la vida”. Y se reunirán los hijos de Judá y los hijos de Israel, y nombrarán un solo jefe, y volverán a levantarse en la tierra; porque el día de Jezrel será grande.

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OSEAS 1:2-11 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)

El Señor comenzó así el mensaje que quería comunicar por medio de Oseas: «La tierra de Israel se ha prostituido apartándose de mí. De la misma manera, ve tú y toma por mujer a una prostituta, y ten hijos con ella; así ellos serán hijos de una prostituta.» Oseas tomó entonces por mujer a Gómer, hija de Diblaim, la cual quedó embarazada y le dio un hijo. Entonces el Señor le dijo a Oseas: «Llama Jezreel al niño, porque dentro de poco voy a castigar a los descendientes del rey Jehú por los crímenes que él cometió en Jezreel, y voy a poner fin al reino de Israel. Ese día destruiré en el valle de Jezreel el poderío militar de Israel.» Gómer volvió a quedar embarazada y tuvo una hija. El Señor le dijo a Oseas: «Llama Lo-ruhama a la niña, porque ya no volveré a tener compasión del reino de Israel. No los perdonaré. En cambio, tendré compasión del reino de Judá: yo mismo, el Señor su Dios, los salvaré. Pero no los salvaré por medio de la guerra, sino que lo haré sin arco ni espada ni caballos ni jinetes.» Después de haber destetado a Lo-ruhama, Gómer volvió a quedar embarazada y tuvo un hijo. Entonces el Señor le dijo a Oseas: «Llama Lo-amí al niño, porque ustedes ya no son mi pueblo ni yo soy ya su Dios.» 10 (2.1) Un día los israelitas serán como la arena del mar, que nadie la puede medir ni contar. Y en vez de decirles: «Ustedes ya no son mi pueblo», Dios les dirá: «Ustedes son hijos del Dios viviente.» 11 (2.2) Entonces se juntará la gente de Judá y de Israel, y nombrarán un jefe único, y de todas partes volverán a Jerusalén. ¡Grande será el día de Jezreel!

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OSEAS 1:2-11 La Biblia de las Américas (LBLA)

Cuando por primera vez el SEÑOR habló por medio de Oseas, el SEÑOR le dijo: Anda, toma para ti a una mujer ramera y engendra hijos de prostitución; porque la tierra se prostituye gravemente, abandonando al SEÑOR. Fue, pues, y tomó a Gomer, hija de Diblaim; y ella concibió y le dio a luz un hijo. Y el SEÑOR dijo a Oseas: Ponle por nombre Jezreel, porque dentro de poco castigaré a la casa de Jehú por la sangre derramada en Jezreel, y pondré fin al reino de la casa de Israel. Y sucederá que en aquel día quebraré el arco de Israel en el valle de Jezreel. Ella concibió otra vez y dio a luz una hija. Y el Señor le dijo: Ponle por nombre Lo-ruhamá, porque ya no me compadeceré de la casa de Israel, pues no los perdonaré jamás. Pero me compadeceré de la casa de Judá y los salvaré por el SEÑOR su Dios; y no los salvaré con arco, ni con espada, ni con batalla, ni con caballos ni jinetes. Después de haber destetado a Lo-ruhamá, ella concibió y dio a luz un hijo. Y el Señor dijo: Ponle por nombre Lo-ammí, porque vosotros no sois mi pueblo y yo no soy vuestro Dios. ¶Pero el número de los hijos de Israel será como la arena del mar, que no se puede medir ni contar; y sucederá que en el lugar donde se les dice: No sois mi pueblo, se les dirá: Sois hijos del Dios viviente. Y los hijos de Judá y los hijos de Israel se reunirán, y nombrarán para sí un solo jefe, y subirán de la tierra, porque grande será el día de Jezreel.

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OSEAS 1:2-11 Nueva Traducción Viviente (NTV)

Cuando el SEÑOR le habló por primera vez a Israel por medio de Oseas, le dijo al profeta: «Ve y cásate con una prostituta, de modo que algunos de los hijos de ella sean concebidos en prostitución. Esto ilustrará cómo Israel se ha comportado como una prostituta, al volverse en contra del SEÑOR y al rendir culto a otros dioses». Así que Oseas se casó con Gomer, hija de Diblaim. Ella quedó embarazada y le dio un hijo. Entonces el SEÑOR dijo: «Ponle al niño por nombre Jezreel, porque estoy a punto de castigar a la dinastía del rey Jehú para vengar los asesinatos que cometió en Jezreel. De hecho, pondré fin a la independencia de Israel y acabaré con su poderío militar en el valle de Jezreel». Al poco tiempo, Gomer quedó embarazada otra vez y dio a luz una niña. Entonces el SEÑOR le dijo a Oseas: «Ponle por nombre a tu hija Lo-ruhama —“no amada”— porque ya no le demostraré amor al pueblo de Israel ni lo perdonaré; pero sí le demostraré amor al pueblo de Judá. Lo libraré de sus enemigos, no con armas y ejércitos ni con caballos y jinetes, sino con mi poder como el SEÑOR su Dios». Después que Gomer destetó a Lo-ruhama, quedó nuevamente embarazada y dio a luz un segundo hijo. Entonces el SEÑOR dijo: «Ponle por nombre Lo-ammi —“no es mi pueblo”— porque Israel no es mi pueblo y yo no soy su Dios. »Sin embargo, llegará el día cuando el pueblo de Israel será como la arena a la orilla del mar, ¡imposible de contar! Así que en el lugar donde se les dijo: “Ustedes no son mi pueblo”, se dirá: “Ustedes son hijos del Dios viviente”. Entonces los pueblos de Judá e Israel se unirán, elegirán un solo líder y regresarán juntos del destierro. Qué gran día será —el día de Jezreel— cuando Dios plantará de nuevo a su pueblo en su tierra.

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