Daniel 11:40-45
Daniel 11:40-45 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
»”Cuando llegue el tiempo del fin, el rey del sur trabará combate contra el rey del norte, pero este responderá a su ataque con carros y caballos, y con toda una flota de barcos de guerra. Invadirá muchos países y los arrasará como una inundación. También invadirá la Hermosa Tierra, y muchos países caerán bajo su poder, aunque Edom y Moab y los jefes de Amón escaparán de sus manos. Extenderá su poder sobre muchos países; ni Egipto podrá salvarse. Se adueñará de los tesoros de oro y plata de Egipto, y de todas sus riquezas, y también someterá a los libios y a los cusitas. Sin embargo, le llegarán noticias alarmantes del este y del norte. En su furor se pondrá en marcha dispuesto a destruir y matar a mucha gente. Plantará su campamento real entre los mares, en el bello monte santo; pero allí llegará su fin y nadie acudirá en su ayuda.
Daniel 11:40-45 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
»Cuando llegue el momento final, el rey del sur atacará al rey del norte, pero este responderá a los ataques. Saldrá al frente de carros de guerra, y de todo un ejército montado a caballo, y apoyado por muchos barcos. ¡Caerá sobre todo el país, con la fuerza de una tormenta! También invadirá la tierra más hermosa, y matará a muchísimas personas; sin embargo, no les pasará nada a los que viven en Edom y Moab, ni a la mayoría de los que viven en Amón. »El ejército del rey del norte conquistará varios países, y ni siquiera Egipto se escapará. El rey se llevará todos los tesoros de Egipto: el oro, la plata y todas sus riquezas. Después de eso, conquistará Libia y Etiopía. »Pero le llegarán noticias del este y del norte, que le darán mucho miedo. Se enojará tanto que querrá matar a muchos. Entonces pondrá su campamento entre el mar y la montaña de Dios, que está en la tierra más hermosa. Allí le llegará la hora de su muerte, y nadie podrá ayudarlo.
Daniel 11:40-45 Reina Valera Contemporánea (RVC)
»Cuando llegue el momento del fin, el rey del sur luchará contra el rey del norte, y este se levantará contra aquel como una tempestad, con carros de guerra y gente de a caballo, y con muchas naves, y lo atacará por tierra, y lo arrasará como una inundación. Invadirá la tierra gloriosa, y muchas provincias serán conquistadas, aunque Edom y Moab, y la mayoría de los hijos de Amón lograrán escapar. Extenderá su mano contra muchos países, y ni Egipto podrá librarse de él. Se apoderará de los tesoros de oro y plata de Egipto, y de todos sus objetos preciosos, y luego se apoderará de las riquezas de Libia y de Etiopía. Pero cuando se entere de las noticias del oriente y del norte se llenará de temor y, lleno de ira, saldrá para destruir y matar a muchos. Plantará las tiendas de su palacio entre los mares y el monte santo y glorioso, pero su fin llegará y no habrá nadie que lo ayude.
Daniel 11:40-45 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
»”Cuando llegue el momento final, el rey del sur atacará al rey del norte; pero este saldrá a su encuentro y, como una tormenta, se lanzará contra el sur, inundando todo el país con carros de guerra, tropas de caballería y muchos barcos. También entrará en la Tierra de la Hermosura y matará a muchísima gente; pero se salvarán los habitantes de Edom y Moab, y la mayor parte del territorio de Amón. Su ejército ocupará otros países, y ni siquiera Egipto se librará. Se llevará los tesoros de oro y plata, y todos los objetos preciosos de Egipto; luego les llegará su turno a Libia y Etiopía. Pero recibirá noticias del este y del norte, que le dejarán alarmado; entonces saldrá furioso, con la idea de hacer una gran matanza, y establecerá su campamento real entre el mar y el santo monte de la Hermosura. Pero allí mismo llegará la hora de su muerte, y no habrá nadie que lo ayude.
Daniel 11:40-45 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
Pero al cabo del tiempo el rey del sur contenderá con él; y el rey del norte se levantará contra él como una tempestad, con carros y gente de a caballo, y muchas naves; y entrará por las tierras, e inundará, y pasará. Entrará a la tierra gloriosa, y muchas provincias caerán; mas estas escaparán de su mano: Edom y Moab, y la mayoría de los hijos de Amón. Extenderá su mano contra las tierras, y no escapará el país de Egipto. Y se apoderará de los tesoros de oro y plata, y de todas las cosas preciosas de Egipto; y los de Libia y de Etiopía le seguirán. Pero noticias del oriente y del norte lo atemorizarán, y saldrá con gran ira para destruir y matar a muchos. Y plantará las tiendas de su palacio entre los mares y el monte glorioso y santo; mas llegará a su fin, y no tendrá quien le ayude.
Daniel 11:40-45 La Biblia de las Américas (LBLA)
Y al tiempo del fin, el rey del sur se enfrentará con él, y el rey del norte lo atacará con carros, jinetes y con numerosas naves; entrará en sus tierras, las invadirá y pasará. También entrará a la Tierra Hermosa, y muchos países caerán; mas estos serán librados de su mano: Edom, Moab y lo más selecto de los hijos de Amón. Y extenderá su mano contra otros países, y la tierra de Egipto no escapará. Se apoderará de los tesoros ocultos de oro y plata y de todas las cosas preciosas de Egipto. Libios y etíopes seguirán sus pasos. Pero rumores del oriente y del norte lo turbarán, y saldrá con gran furor para destruir y aniquilar a muchos. Y plantará las tiendas de su pabellón entre los mares y el monte glorioso y santo; pero llegará a su fin y no habrá quien lo ayude.
Daniel 11:40-45 Nueva Traducción Viviente (NTV)
»Luego, al tiempo del fin, el rey del sur atacará al rey del norte. El rey del norte saldrá precipitadamente en carros de guerra con sus conductores y una enorme armada. Invadirá varios territorios y los arrasará como una inundación. Entrará en la gloriosa tierra de Israel y muchas naciones caerán, pero Moab, Edom y la mayor parte de Amón escaparán de sus manos. Conquistará muchos países y ni siquiera Egipto se salvará. Se apoderará del oro, de la plata y de los tesoros de Egipto; los libios y los etíopes serán sus sirvientes. »Pero luego lo alarmarán las noticias provenientes del oriente y del norte y saldrá con furia a destruir y a aniquilar a muchos. Se detendrá entre el glorioso monte santo y el mar y allí instalará sus carpas reales, pero mientras esté allí, terminará su tiempo de repente y no habrá quien lo ayude.