2 Samuel 3:29
2 Samuel 3:29 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
¡Los responsables de su muerte son Joab y toda su familia! ¡Que nunca falte en la familia de Joab alguien que sufra de hemorragia o una enfermedad en la piel, o que use muletas, o que muera violentamente, o que pase hambre!».
2 Samuel 3:26-30 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
En cuanto Joab salió de hablar con David, mandó a decirle a Abner que regresara, pero sin decírselo a David. Abner ya había llegado al pozo de Sirá, pero regresó a Hebrón. Tan pronto como llegó a la entrada de la ciudad, Joab lo llevó aparte, como si quisiera decirle algo a solas, y le clavó un cuchillo en el estómago. Así fue como Joab y su hermano Abisai se desquitaron de la muerte de su hermano Asael en la batalla de Gabaón. Cuando David supo lo que había pasado, dijo: «Juro por Dios que ni yo ni mi gente tenemos la culpa de la muerte de Abner. Que Dios castigue a Joab y a toda su familia. Que entre ellos siempre haya enfermos. Que la piel se les pudra y sus heridas no se cierren. Que haya entre ellos cojos, y que se mueran de hambre o que los maten en la guerra».
2 Samuel 3:29 Reina Valera Contemporánea (RVC)
¡Que recaiga un severo castigo sobre Joab y sobre toda la familia de su padre! ¡Que nunca falte en su casa quien padezca flujo de sangre, ni quien sea leproso o inválido, ni quien muera asesinado o sufra de hambre!»
2 Samuel 3:29 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
¡Que caiga la culpa sobre la cabeza de Joab y sobre toda su familia, y que nunca falte en su casa quien sufra de flujo, lepra o cojera, ni quien sea asesinado o padezca hambre!»
2 Samuel 3:29 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
Caiga sobre la cabeza de Joab, y sobre toda la casa de su padre; que nunca falte de la casa de Joab quien padezca flujo, ni leproso, ni quien ande con báculo, ni quien muera a espada, ni quien tenga falta de pan.
2 Samuel 3:29 La Biblia de las Américas (LBLA)
Caiga su sangre sobre la cabeza de Joab y sobre toda la casa de su padre, y nunca falte en la casa de Joab quien padezca flujo, ni quien sea leproso, ni quien se sostenga con báculo, ni quien muera a espada, ni quien carezca de pan.