Salmos 119:71-72

En el Salmo 119: 71. El salmista describe que el sufrimiento, el haber sido afligido por el Señor, le hizo bien porque le enseñó a prestar atención a Sus decretos. La palabra hebrea para aflicción, en el original, significa incomodar, tallar, someter, castigar, machacar, debilitar, humillar y deprimir. Y de acuerdo al testimonio del salmista, todo esto le sucedió con un propósito en Dios.

Si has sido salvo por Jesucristo, has recibido el sello del Espíritu de Dios; es decir, has sido revestido de poder, de una gracia sobrenatural que te entrenará para enfrentar grandes batallas, batallas que te llevarán a avanzar de gloria y en gloria y de victoria en victoria, no sólo como hijo, sino como soldado de Su ejército.

¿Batallas con tu alimentación? ¿Te cuesta trabajo tener un balance? En este devocional de 5 días en compañía de la nutrióloga y consejera bíblica Brenda Pérez, descubrirás que los problemas de alimentación tienen un trasfondo espiritual que solo Cristo, a través de Su Palabra, puede cambiar. Cada día tendrás diferentes retos físicos y espirituales para traer gloria a Dios con cada elección de alimentos. ¡Acompáñanos a este estudio que cambiará tu salud física y espiritual!

Dios quiere que vivamos con un corazón sano, libre de pecado y lleno de amor. Este estudio analiza tres formas en que el pecado obstaculiza el amor cuando pecamos: nuestros corazones se enfrían, nuestros corazones se endurecen y nos escondemos en lugar de abrazar a Dios y a los demás. Pero el amor obstaculiza el pecado, la receta para nuestro problema del corazón es que dejemos de hacer el mal.