SABIDURÍA 1
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I. LOS BUENOS, LOS MALOS Y EL JUICIO DE DIOS (1–5)#1.1-5.23 En esta primera parte del libro se contraponen los diferentes criterios y actitudes de los buenos y los malos, como también el diferente juicio de Dios sobre ellos.
La rectitud, garantía de vida eterna
1Gobernantes de la tierra,#1.1 Gobernantes de la tierra: El autor, hablando como si fuera el rey Salomón (véase Introducción), puede dirigirse con autoridad a los gobernantes de la tierra. Las instrucciones que da buscan ordenar rectamente toda la sociedad. amad la justicia,#1.1 Aquí justicia equivale a vivir de acuerdo con la voluntad de Dios, haciendo lo que él exige, tanto respecto de Dios mismo como de los hombres. En toda esta primera sección, la justicia, contrapuesta a la maldad, aparece como tema importante.
tened buena idea del Señor
y buscadlo con corazón sincero.
2Los que no le exigen pruebas pueden encontrarlo;#1.2 Cf. 1 Cr 28.9; 2 Cr 15.2.
él se manifiesta a los que no desconfían de él.
3Los pensamientos torcidos alejan de Dios.
Su poder,#1.3 Su poder: En esta sección los términos poder (1.3), sabiduría (1.4,6), santo espíritu o espíritu del Señor (1.5,7) designan atributos de Dios estrechamente relacionados entre sí. cuando es puesto a prueba,
deja sin palabras a los insensatos.
4La sabiduría#1.4 La sabiduría: Este tema es central en todo el libro (véase Introducción). A diferencia de una sabiduría humana y solo teórica, esta sabiduría tiene origen divino y exige condiciones morales para poder ser recibida. Se describirá más ampliamente en la segunda sección (6.1–9.18). no entra en un alma perversa,
ni vive en un cuerpo#1.4 Alma y cuerpo designan a toda la persona. entregado al pecado.
5El santo espíritu,#1.5 El santo espíritu: Véase 1.3 n. que es maestro de los hombres,#1.5 Maestro de los hombres: Dios enseña la sabiduría aquí descrita, la que siempre lo tiene a él como punto de partida y de referencia.
nada tiene que ver con el engaño;
se aparta de los pensamientos insensatos
y se retira cuando está presente la injusticia.
6La sabiduría es un espíritu amigo de los hombres,#1.6 Amigo de los hombres: El autor expresa con un término muy griego (cf. también 7.23) un tema central en toda la Biblia. Cf. Ex 34.6-7; Jn 3.16; Tit 3.4-5; 1 Jn 4.8-10.
que no perdona al que injuria a Dios con sus palabras;#1.6 En el cap. 2 se expone más claramente qué es lo que dice el que injuria a Dios con sus palabras.
Dios es testigo de lo más íntimo del hombre,
es vigilante sincero de su corazón
y escucha todo lo que dice.#1.6 Dios, que está presente en todas partes, conoce hasta los más íntimos sentimientos del ser humano. Cf. Jer 11.20.
7En efecto, el espíritu del Señor llena la tierra,
da consistencia al universo
y conoce lo que dice el hombre.
8Por eso, quien dice cosas malas no puede esconderse,#1.8 Cf. Eclo 39.19.
ni podrá escapar del juicio y de la acusación de Dios.
9Los pensamientos del malo serán investigados,
y, como prueba de sus malas acciones,
llegará hasta el Señor el informe de lo que haya dicho.
10Dios lo escucha todo con oído atento;
ni aun lo dicho en voz baja por el hombre se le escapa.
11Evitad, por tanto, las murmuraciones inútiles
y no digáis nada malo,
porque incluso lo dicho en secreto trae sus consecuencias,
y una boca mentirosa lleva al hombre a la muerte.#1.11 En toda esta primera sección se contraponen la muerte, que es la suerte reservada a los malos, y la vida, reservada a los buenos. Estos dos términos no designan únicamente la vida y la muerte físicas, sino que expresan la situación permanente del hombre respecto de Dios, única fuente de la verdadera vida. Véase 1.15 n.
12No busquéis la muerte con una vida extraviada,
ni por vuestras acciones atraigáis sobre vosotros la perdición.
13Pues Dios no hizo la muerte#1.13 Cf. 2.23-24.
ni se alegra destruyendo a los seres vivientes.#1.13 Cf. Ez 18.31-32; 33.11; 2 P 3.9.
14Todo lo creó para que existiera;
lo que el mundo produce es saludable
y en ello no hay veneno mortal;
la muerte no reina en la tierra,
15porque la justicia es inmortal.#1.15 La idea de inmortalidad responde a las profundas aspiraciones de los lectores familiarizados con la cultura griega. En Sab se entiende como eternidad feliz en manos de Dios (cf. 3.1-4), concedida por la sabiduría (6.17-19; 8.13-17) a los que practican la justicia viviendo según la voluntad de Dios (5.15). Cf. también 15.3 y véase Eclo 14.19 n.
El pensamiento de los malos#1.16–2.20 Con la forma literaria de un discurso, se describe, en 2.1-20, la actitud de los malos.
16Los malos#1.16 Los malos: En esta sección se insiste más en describir su manera de pensar y de vivir que en identificarlos como grupo social, político o religioso. Su “maldad” incluye elementos teóricos y prácticos, religiosos y morales. Cf. 2.21-22; 3.10. llaman a la muerte con gestos y gritos;
pensando que es su amiga, la buscan con afán,
y con ella han hecho un pacto,
pues merecen pertenecerle.
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Dios Habla Hoy (DHH) versión española Copyright © Sociedad Bíblica de España, 1992 Utilizada con permiso