APOCALIPSIS 4
4
II.— LOS SIETE SELLOS (4,1—8,1)
El trono de Dios
1Después de todo esto tuve una visión. Vi una puerta abierta en el cielo, y aquella voz como de trompeta que me había hablado primero, me dijo:
— Sube aquí, que voy a mostrarte lo que tiene que suceder en adelante.#19,11; Gn 28,17; Ez 1,1; Mc 1,10; Jn 1,51.
2Al instante caí en éxtasis, y vi un trono colocado en medio del cielo y alguien sentado en él.#5,1; 6,16; 7,10; 19,4; 21,5; 1 Re 22,19; Is 6,1; Ez 1,26; 10,1; Eclo 1,8. 3El que estaba sentado resplandecía como el jaspe y el sardonio, mientras un halo de color esmeralda#4,3: jaspe… sardonio… esmeralda: Las tres piedras preciosas más estimadas en la antigüedad, que sirven como punto de referencia para describir la belleza de las personas u objetos que protagonizan la escena. No siempre es precisa la equivalencia de las palabras griegas con la terminología actual. rodeaba el trono alrededor. 4Rodeando también el trono había otros veinticuatro tronos y, sentados en ellos, veinticuatro ancianos vestidos de blanco y ceñidas sus cabezas con coronas de oro.#3,4.11. 5Relámpagos y truenos fragorosos salían del trono ante el que ardían siete#4,4-5: veinticuatro… siete: En la Biblia, y sobre todo en el presente libro, el siete, el doce y sus respectivos múltiplos son con frecuencia números simbólicos. lámparas, que eran los siete espíritus de Dios;#1,4; Ex 19,16; Ez 1,13; Za 4,2. 6y un mar transparente, como de cristal, se extendía también delante del trono. En medio del trono y a su alrededor había cuatro seres vivientes, todo ojos por delante y por detrás#4,6: de cristal: El cielo, en cuyo centro se alza el trono de Dios y del Cordero, se concibe como una inmensa sala cuyo pavimento se compara a un infinito mar de aguas nítidas y resplandecientes.— por detrás: El simbolismo de este pasaje se inspira en Ez 1,5-21. En realidad, Ezequiel es una de las más importantes fuentes de inspiración de Apocalipsis..#15,2; 19,4. 7El primero era semejante a un león; el segundo, como un toro; con rostro como de hombre el tercero; y el cuarto, semejante a un águila en pleno vuelo. 8Cada uno de los cuatro vivientes tenía seis alas#4,8: cuatro vivientes… seis alas: No es fácil descifrar el simbolismo de estos seres alados que parecen evocar pasajes del AT tales como Ex 25,17-22; 1 Sm 4,4; Is 6,1-7; Ez 1,5-21; 10,1-14; Sal 80,1. y eran todo ojos por fuera y por dentro. Día y noche proclaman sin descanso:
— Santo, santo, santo,
Señor Dios, dueño de todo,
el que era, el que es,
el que está a punto de llegar.#1,4.8; Is 6,2-3; Ez 1,18.
9Y cada vez que los cuatro vivientes tributan gloria y honor y acción de gracias al que está sentado en el trono, al que vive por siempre,#4,2; Dn 4,31; 12,7. 10los veinticuatro ancianos caen de rodillas ante el que está sentado en el trono, adoran al que vive por siempre y arrojan sus coronas a los pies del trono, diciendo:
11— Señor y Dios nuestro:
¡Nadie como tú merece recibir
la gloria, el honor y el poder!
Porque tú has creado todas las cosas;
en tu designio existían,
y conforme a él fueron creadas.
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APOCALIPSIS 4: BHTI
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La Biblia Hispanoamericana (BHTI) Traducción Interconfesional versión hispanoamericana Copyright © Sociedad Bíblica de España, 2011 Utilizada con permiso