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Miqueas 5

5
Restauración de la dinastía de David
1 1 (4.14)#5.1-15(4.14—5.14) Las cifras entre paréntesis corresponden a la numeración del texto hebreo. «Pero ahora, Jerusalén, prepara tu defensa,
porque has sido sitiada
y van a castigar duramente al jefe de Israel.
2 2 (1) En cuanto a ti, Belén Efrata,#5.2(1) Efrata: Esta palabra, derivada de una raíz que significa producir, designaba originalmente a un clan relacionado con Caleb (cf. 1 Cr 2.19,24,50), que se estableció en la región de Belén (cf. Rt 1.2; 1 S 17.12; 1 Cr 4.4); pero más tarde pasó a designar la ciudad de Belén (cf. Gn 35.19; 48.7; Rt 4.11). Los evangelistas reconocieron en Belén el lugar del nacimiento del Mesías (Mt 2.6; Jn 7.42).
pequeña entre los clanes de Judá,
de ti saldrá un gobernante de Israel
que desciende de una antigua familia.»#5.2(1) Que desciende de una antigua familia: Probablemente se alude al rey David y a su dinastía. David, que procedía de Belén (1 S 16.1,13), recibió un mensaje de Dios por medio del profeta Natán, en el que se le anunciaba que su dinastía y su trono quedarían establecidos para siempre (2 S 7.4-16). Cf. Sal 89.3-4(4-5); 132.11-12; Is 9.2-7; 11.1-10.
3 3 (2) Ahora el Señor deja a los suyos,
pero solo hasta que dé a luz
la mujer que está esperando un hijo.#5.3(2) La mujer que está esperando un hijo: Algunos estudiosos han entendido este v. como una alusión a Is 7.14 y 9.6; otros lo relacionan con Miq 4.9-10, donde se afirma que el pueblo de Israel, simbolizado como una mujer con dolores de parto, tendrá un rey justo que lo librará del exilio.
Entonces se reunirán con sus compatriotas
los israelitas que están en el destierro.
4 4 (3) El rey se levantará para pastorear a su pueblo
con el poder y la majestad del Señor su Dios,
y ellos podrán vivir en paz,
porque el Señor será engrandecido
hasta el último rincón de la tierra.
5 5 (4) Él traerá la paz.#5.5(4) Él traerá la paz: otra posible traducción Él será la paz. Cf. Sal 72.7; Is 9.6; 11.6-9; Zac 9.10. Véase Ef 2.14 nota.
Cuando los asirios invadan nuestro país
y entren en nuestros palacios,
enviaremos contra ellos
siete jefes y ocho#5.5(4) Siete... y ocho: Esta progresión numérica es un recurso literario que indica un número indeterminado, pero considerable (véase Am 1.3 n.). hombres importantes.
6 6 (5) Ellos gobernarán Asiria,
el país de Nimrod,#5.6(5) En el antiguo Oriente, Nimrod era una figura legendaria (cf. Gn 10.8-12). a filo de espada,
y nos librarán de los asirios#5.6(5) Los asirios fueron poderosos enemigos de Israel, que destruyeron Samaria en el año 721 a.C. y luego hicieron estragos en varias poblaciones de Judá (cf. 2 R 17—19; 2 Cr 32.1-23; Is 36).
que hayan cruzado nuestras fronteras
e invadido nuestra tierra.#5.1-6(4.14—5.5) Ésta es una de las profecías más importantes del libro de Miqueas. Aunque el pueblo de Dios sea humillado por sus enemigos (4.11), de Belén (5.2[1]) y de la casa de David surgirá el gobernante que apacentará al pueblo y traerá la paz (5.4-5[3-4]).
Destrucción de los enemigos
7 7 (6) Entonces, en medio de muchos pueblos,
los que queden#5.7(6) Los que queden: Véase Miq 2.12 nota. del pueblo de Jacob
serán como el rocío que envía el Señor, como las lluvias que caen sobre la hierba,
que no dependen de la voluntad del hombre.
8 8 (7) Entonces, en medio de muchas naciones,
lo que quede del pueblo de Jacob
será como un león entre los animales salvajes,
como un león en un rebaño de ovejas,
que al pasar las desgarra y destroza,
y no deja que ninguna escape con vida.
9 9 (8) Así atacarás tú, Señor, y destruirás
a todos tus enemigos.
Fin de la guerra y la idolatría
10 10 (9) Esto afirma el Señor:
«En aquel día mataré tus caballos
y destruiré tus carros de guerra;#5.10(9) Tus caballos... carros de guerra: Los israelitas importaron y utilizaron el caballo con fines militares en tiempos de Salomón (cf. 1 R 10.26-29); además, siguiendo el ejemplo de otras naciones, reforzaron sus ejércitos con carros de guerra y jinetes (cf. 1 R 9.19; 10.26; 2 Cr 1.14-17; 9.25-28). Durante mucho tiempo, el caballo se usó exclusivamente con fines bélicos (Job 39.19-25; cf. Zac 6.1-8; Ap 6.1-8). Cf. Est 6.8-11; Ec 10.7.,#5.10(9) Los profetas criticaron el uso de caballos y carros de guerra, porque eran un signo de inseguridad y de falta de confianza en el poder de Dios. Cf. Sal 20.7(8); Is 2.4; 30.15-17; Os 10.13; 14.3; Hag 2.22; Zac 9.10.
11 11 (10) convertiré en ruinas tus ciudades
y derribaré todas tus fortalezas;
12 12 (11) acabaré con tus hechicerías
y te dejaré sin adivinos;#5.12(11) Lv 19.26; Dt 18.10,14; Is 2.6; 47.9,12-13; Jer 27.9; Nah 3.4.
13 13 (12) destruiré tus ídolos y piedras sagradas,
para que no vuelvas a adorar jamás
a los dioses que tú mismo hiciste.#5.13(12) Ex 20.4; Lv 26.1; Dt 5.8; 16.22.
14 14 (13) Arrancaré tus árboles sagrados#5.14(13) Árboles sagrados: Lit. imágenes de Asera, diosa cananea de la fertilidad, cuyos símbolos eran el poste liso o tallado y también el árbol.
y destruiré por completo tus ciudades.
15 15 (14) En mi furor, tomaré venganza
de las naciones que no quisieron obedecerme.»

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