YouVersion Logo
Search Icon

Jeremías 27

27
Acción simbólica: el yugo#27.1-22 Una vez más, el profeta anuncia su mensaje valiéndose de una acción simbólica (véase Jer 13.1-11 n.). Dios, que es el Señor de la historia, ha concedido por un tiempo la soberanía a Nabucodonosor, rey de Babilonia (cf. v. 6), y las naciones que no se sometan a él tendrán que atenerse a las consecuencias (cf. v. 8). Cf. Jer 21.3-10.
1El año cuarto#27.1 El año cuarto: texto probable (cf. Jer 28.1). Heb. al comienzo. del reinado de Sedequías,#27.1 Sedequías: según algunas versiones y mss. antiguos (cf. v. 3). Heb. Joaquim. Sedequías reinó entre los años 598 y 587 a.C., de manera que el año cuarto corresponde al año 594 a.C. Cf. 2 R 24.18-20; 2 Cr 36.11-13. hijo de Josías, en Judá, el Señor se dirigió a Jeremías, 2y le dijo: «Hazte unas correas y un yugo, y póntelo todo al cuello. 3Luego manda un recado#27.3 Un recado: texto probable. Heb. a ellos. a los reyes de Edom, Moab, Amón, Tiro y Sidón#27.3 Edom, Moab y Amón se encontraban, respectivamente, al sur, al sudeste y al este de Judá (véase Jer 9.25-26[24-25] nota). Tiro y Sidón, en Fenicia, sobre la costa del Mediterráneo. Véanse Jos 11.8 n. e Índice de mapas. por medio de los mensajeros que han venido a Jerusalén a visitar al rey Sedequías.#27.3 Estos mensajeros habían ido a Jerusalén para formar una coalición contra el rey de Babilonia. 4Ordénales decir a sus soberanos que yo, el Señor todopoderoso, el Dios de Israel, digo: 5Con gran despliegue de poder hice el mundo,#27.5 Con gran despliegue de poder: Dt 4.34; 5.15; 7.19; 9.29; 11.2; 26.8. Hice el mundo: Véanse las referencias en Jer 32.17 n. y los hombres y animales que hay en él, y puedo dárselo a quien yo quiera.#27.5 El Señor posee la plenitud del poder, y él puede dárselo a quien quiera. La literatura apocalíptica desarrollará ampliamente esta idea. Cf. Dn 2.20-21,37-38; 4.25-32(22-32). 6Pues bien, yo he puesto todas estas tierras bajo el poder de mi servidor Nabucodonosor, rey de Babilonia,#27.6 Mi servidor Nabucodonosor, rey de Babilonia: Nabucodonosor recibe este calificativo porque el Señor se vale de él para llevar a cabo sus designios. Cf. Is 45.1. y hasta a los animales salvajes los he puesto bajo su dominio. 7Todas las naciones estarán sometidas a él, a su hijo y a su nieto, hasta que a su país le llegue el momento de estar también sometido a grandes naciones y reyes poderosos. 8Y si algunas naciones o reyes no se someten al yugo de Nabucodonosor, yo los castigaré con guerra, hambre y peste,#27.8 Guerra, hambre y peste: Véanse las referencias en Jer 14.12 n. hasta que todos queden bajo su poder. Yo, el Señor, lo afirmo.
9»Por tanto, no hagan ustedes caso a esos profetas, adivinos o intérpretes de sueños, ni a los hechiceros que pretenden predecir el futuro y que les aconsejan no someterse al rey de Babilonia. 10Eso que les dicen es mentira, y lo único que van a conseguir ustedes es que los destierren de su país, y que yo los disperse y mueran. 11En cambio, a la nación que se someta al poder del rey de Babilonia, yo la dejaré quedarse en su tierra para que viva en ella y la cultive. Yo, el Señor, lo afirmo.»
12Yo, Jeremías, repetí todo esto a Sedequías, rey de Judá, y además le dije: «Sométanse al poder del rey de Babilonia y de su pueblo, y vivirán. 13¿Qué necesidad hay de que mueran tú y tu pueblo a causa de la guerra, el hambre y la peste? Porque el Señor ha dicho que esto le pasará a toda nación que no se someta al rey de Babilonia. 14No hagan caso a esos profetas que les aconsejan no someterse al rey de Babilonia, porque lo que les dicen es mentira. 15El Señor afirma que él no los envió; falsamente hablan ellos en el nombre del Señor. Y así, el Señor acabará por dispersarlos a ustedes, y ustedes y los profetas que les han dicho esas cosas morirán.»
16También me dirigí a los sacerdotes y a todo el pueblo, y les dije: «Esto dice el Señor: “No hagan caso a los profetas que les aseguran que muy pronto van a ser devueltos de Babilonia los utensilios del templo.#27.16 Estos utensilios del templo habían sido llevados a Babilonia en la primera deportación. Cf. 2 R 24.13. Eso que les dicen es mentira. 17¡No les hagan caso! Sométanse al rey de Babilonia y vivirán. ¿Qué necesidad hay de que esta ciudad se convierta en un montón de ruinas? 18Si realmente son profetas, y en verdad yo les he hablado, que me pidan a mí, el Señor todopoderoso, que no permita que sean llevados a Babilonia los utensilios que aún quedan en el templo, en el palacio del rey de Judá y en Jerusalén.”
19-21»Cuando el rey Nabucodonosor se llevó de Jerusalén a Jeconías, hijo de Joaquim, rey de Judá, y lo desterró a Babilonia junto con todos los hombres principales de Judá y de Jerusalén,#27.19-21 Cf. 2 R 24.8-17; 2 Cr 36.9-10. no se llevó las columnas, ni la enorme pila de bronce para el agua, ni las bases, ni el resto de los utensilios del templo. El Señor todopoderoso dice a propósito de esos objetos que quedaron en el templo y en el palacio del rey de Judá y en Jerusalén:#27.19-21 Acerca de las columnas, la pila de bronce y las bases, cf. 1 R 7.15-39. Los babilonios las consideraban particularmente valiosas a causa del metal con que habían sido fabricadas. 22“Se los llevarán a Babilonia, y allí se quedarán hasta que yo quiera traerlos otra vez a este lugar.#27.22 Traerlos otra vez a este lugar: Cf. Esd 1.7-11; 5.14-15; 6.5; 7.19. Yo, el Señor, lo afirmo.”»

Currently Selected:

Jeremías 27: DHH94PC

Highlight

Share

Copy

None

Want to have your highlights saved across all your devices? Sign up or sign in

YouVersion uses cookies to personalize your experience. By using our website, you accept our use of cookies as described in our Privacy Policy