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SALMOS 31

31
Salmo 31 (30)
Mi destino está en tus manos#Salmo 31 (30): Salmo de súplica individual de una persona injustamente perseguida y acusada. A esta circunstancia se añaden la enfermedad y el abandono como causas que desencadenan la petición de auxilio a Dios, el Dios en quien pone toda su confianza y a quien agradece su intervención salvadora.
1Al maestro del coro. Salmo de David.
2Señor, en ti confío#31,2: en ti confío: En esta primera sección del salmo (31,1-9), la petición de ayuda (31,2-5) se refuerza con distintas motivaciones que subrayan la confianza del orante y reflejan la certeza de que su ruego será escuchado.,
que no quede jamás defraudado;
¡líbrame con tu fuerza salvadora!#7,2; 71,1-3.
3Acerca hacia mí tu oído,
date prisa en socorrerme.
Sé para mí fortaleza protectora,
morada inaccesible que me salve,
4pues tú eres mi bastión, mi baluarte#31,4: bastión… baluarte: Títulos divinos con los que se apela al Dios fiel que ofrece protección y refugio.;
honrando tu nombre, guíame y condúceme.#18,3.
5Libérame de la trampa que me tienden#31,5: la trampa que me tienden: Imagen que alude a las asechanzas y ataques de los enemigos.,
porque tú eres mi refugio.
6A tus manos encomiendo mi vida#31,6: a tus manos encomiendo mi vida: Lit. en tus manos encomiendo mi espíritu, es decir, mi aliento vital, mi vida. Según la tradición lucana estas son las últimas palabras pronunciadas por Jesús en la cruz (Lc 23,46).;
tú, Señor, Dios fiel, me has rescatado.#Lc 23,46; Hch 7,59.
7Odio a quienes sirven a ídolos falsos,
en Dios pongo mi confianza.
8Por tu amor me alegro y me regocijo,
porque tú has mirado mis pesares,
tú conoces mis angustias.#Ex 3,7.
9No me entregaste al enemigo,
me mantuviste en lugar seguro#31,9: me mantuviste en lugar seguro: Lit. pusiste mis pies en lugar espacioso..
10Apiádate de mí, Señor,
que soy presa de la angustia;
se consumen de pena mis ojos,
todo mi ser y mis entrañas#31,10: mi ser y mis entrañas: Se inicia en este verso una nueva súplica que recoge el lamento de quien padece una enfermedad que abate y causa grandes sufrimientos (31,10-14)..#6,8.
11Se agota mi vida en el dolor,
en gemidos mi existencia,
se debilita mi fuerza por mi maldad#31,11: por mi maldad: Según otra lectura, “por mi tristeza”.
y mis huesos se consumen.
12Soy la burla de mis adversarios
y, aún más, la de mis vecinos,
el horror de los que me conocen;
quien me ve por la calle, huye de mí.#38,12; Jb 19,13-19.
13He sido olvidado como un muerto,
soy como un cacharro roto.
14Puedo oír a muchos difamando,
hay terror por todas partes;
contra mí conspiran juntos,
traman arrebatarme la vida#31,14: arrebatarme la vida: Al estado de debilidad física se une una profunda sensación de abandono, desprecio y hostilidad (31,12-14) que se describe con expresiones semejantes a las utilizadas en Sal 22 y Jr 20,7-10..#41,6-9; Jr 6,25; Mt 26,3-4.
15Pero yo, Señor, en ti confío,
yo he dicho: “Tú, Señor, eres mi Dios”.#22,11; Is 25,1.
16Mi destino está en tus manos,
líbrame de mis rivales y de quienes me persiguen.
17Muéstrate favorable con tu siervo,
por tu amor ponme a salvo.#4,7; Nm 6,25.
18Señor, a ti te invoco,
que no quede defraudado;
queden así los malvados,
que en el abismo#31,18: en el abismo: Lit. seol. En otros lugares se ha traducido también por reino de los muertos. Ver VOCABULARIO BÍBLICO. sucumban.
19Enmudezcan los labios mentirosos
que se insolentan contra el justo
llenos de orgullo y desprecio.#12,4.
20¡Qué inmensa es la bondad#31,20-25: ¡Qué inmensa es la bondad…: La sección final de este salmo es un canto de acción de gracias por la bondad que Dios manifiesta hacia quienes se acogen a él, una bondad que se plasma en su actuación a favor del salmista.
que reservas a quien te venera!
La ofreces a quienes en ti confían,
y todo el mundo es testigo.
21Tu rostro los ampara y protege
de las conjuras humanas;
los resguardas en tu Tienda
de las lenguas pendencieras.
22¡Bendito sea el Señor
que me demostró su amor
en momentos de angustia#31,22: en momentos de angustia: Otra lectura: “en la ciudad amurallada”.!
23Yo, azorado, llegué a pensar:
“Me has apartado de tu presencia”.
Pero tú oías mi voz suplicante
mientras a ti clamaba.#Jon 2,5.
24¡Amen al Señor todos sus fieles!
El Señor cuida a quienes son leales
y a los arrogantes castiga con creces.
25¡Manténganse firmes, sigan con ánimo
cuantos en el Señor tienen esperanza!#27,14.

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